Cleveland Heights, Ohio
acuarela, lápiz de color, bolígrafo y tinta
11 pulgadas de largo x 8 pulgadas de ancho
Esta pieza fue creada después de mi parálisis del lado derecho que sucedió al final de 5 meses de dolor sin tratar en mis piernas y en el brazo izquierdo. Me tocó ver cómo se desmoronaba todo lo que me encanta y, como artista, ya no podía crear. Fue particularmente difícil ya que la mano con la que dibujaba ni siquiera podía agarrar un lápiz. Mi esposo me animó a probar con mi mano izquierda. Después de un tiempo de dudas, empecé a dibujar y hacer garabatos con mi mano izquierda y surgió esta imagen en mi libreta. Esta imagen trata del abuso al que fui sometida durante el parto de mi hijo mientras vivía en Israel. Un autoretrato: una mujer que se convirtió en una herida sangrienta y purulenta, sin paz en su vida. Cuando dibujé esto estaba viviendo en la casa del círculo de personas que abusaban de mi y no veía la manera de salir de ahí, aunque soñaba con grandes cosas y con escapar. El dolor en forma de un jardín, donde las semillas crecen y la fruta madura. El dolor en forma de oportunidad e ironía y, dentro de él, se ilumina la pequeña brasa de la esperanza y la redención. Esta es la obra de arte que marcó mi regreso a las artes desde aquel trauma inicial en Israel. Puedo informarles con gratitud que ahora en el 2015, siete años más tarde, estoy empezando a recuperar mi vida.